¿POR QUÉ SE PRODUCE?
Se produce por movimientos repetitivos de la muñeca o del antebrazo y puede estar asociada con la práctica del tenis, golf, hockey, básquet, etc. o alguna actividad que involucre giros repetitivos de la muñeca (destornillador, etc.).
CUALES SON LOS SÍNTOMAS
Se manifiesta por dolor en el codo, que empeora gradualmente y se irradia hacia el antebrazo y dorso de la mano al sujetar o torcer algo, generando también debilidad al levantar objetos. Frecuentemente hay dolor o sensibilidad al presionar localmente la prominencia externa del húmero (epicóndilo). El dolor puede aumentar al extender la muñeca (doblarla hacia atrás como al acelerar una moto) en contra de resistencia.
DIAGNÓSTICO
Habitualmente se requieren radiografías y en los casos de epicondilitis crónicas pueden solicitarse también resonancia magnética de codo.
TRATAMIENTO
El tratamiento comienza con medidas tendientes a disminuir el dolor y la inflamación, con reposo, aplicación de frío , inmovilización con férulas o vendajes, y antinflamatorios. En algunos casos puede ayudar la infiltración local de un corticoide y un anestésico. Dentro de los tratamientos con fisioterapia, son importantes los ejercicios de elongación y fortalecimiento progresivos. Por lo general el tratamiento de rehabilitación es exitoso pero el periodo hasta que los síntomas ceden totalmente puede llevar cerca de un año. La cirugía puede ser necesaria si el dolor persiste a pesar de estos tratamientos no quirúrgicos.
PREVENCIÓN
Para prevenir este problema se debe mantener una buena fortaleza y flexibilidad en los músculos del brazo o evitar movimientos repetitivos que causen dolor.